domingo, 5 de mayo de 2013

vacío sin límites

Novia ya no es, ahora es ex-novia, y a pesar de habernos separado (por decisión mía) oficialmente hace meses, por cuestiones logísticas se fue recién el miércoles pasado, 1ro de mayo. Con todo lo de la mudanza, meter todo en cajas, ver qué es de ella y qué mío, asegurarse de que las cuentas están saldadas, etc., no hubo tiempo para lágrimas. Pero una vez que el camión estaba cargado y los amigos que ayudaron se fueron, y ex-novia también, cerré la puerta, me di media vuelta, vi el departamento semi vacío y se me cayó el alma al piso.
Pasar la aspiradora por la habitación absolutamente vacía que fue una vez nuestro dormitorio, lleno de nuestras almas y nuestras cosas que compramos juntos, de las marcas en la pared de algo que nos tiramos durante una pelea, de la lámpara que elegimos juntos y que buscamos durante meses, las cortinas que ella cosió y yo instalé los soportes. Cada centímetro cuadrado participó de nuestras vidas por años. Ahora están vacíos, llenos de nada. Hay eco en la habitación. Hay frío. Hay derrota. Hay soledad.
Me aplasta el alma y no... puedo soportar el dolor... de haberla perdido. No había otra solución, nunca me enamoré de ella, pero qué hermosa era.
Pasando las aspiradora se sentía como limpiando las migajas de nuestra relación, los restos secos e inertes de todo el esfuerzo que pusimos para que funcionara, y fallamos tan estrepitosamente.
Y ahora la aceptación, el luto, la sanación. La rabia contra el mundo que espero no se convierta en algo feo, o que se pegue y me acompañe por mucho tiempo.
Qué sensación espantosa.

2 comentarios:

Grumpy Goat dijo...

The sadness that you now feel will pass. Look to the future; there's nothing you can possibly do about the past.

Martín dijo...

I know, I know... I just felt very sad when I wrote the post and needed to vent. I'm better now, and getting better every day. Thanks for your words. Wise indeed.