miércoles, 3 de diciembre de 2008

2 días, 21 horas y 18 minutos

Anoche no pude dormir. Soñé con que miraba en el terrario de Nikita y Melba y había dos hámsteres más, y dos conejos. Las pobres estaban aterradas y me miraban con cara de "sacanos de acá". Soñé que la moto se convertía en roja (es plateada), y que la Kawasaki que encargué negra venía en verde (fuchi). Soñé que Novia me retaba por no sé qué. Soñé que tenía gripe. Soñé que... y así toda la noche.
No tengo ganas de hablar, comer, andar en moto (eso ya es grave), salir, entrar, dormir, no dormir... Quiero ir a CASA. ¡Ufa!

5 comentarios:

*La Casalinga* dijo...

Querés ir a casa.
Entendí bien o, como siempre, comprendí cualquier cosa? Estás por venir a TU casa de Argentina o te referis a otra casa?

Martín dijo...

la Real Academia de la Lengua Española Según Martín acepta las siguientes acepciones:
- casa: pila de ladrillos con agujerito superior tapado con tejas, donde uno puede pasar la noche, satisfacer necesidades básicas (hacer pipí, comer, mirar tele, eventualmente bañarse) y refugiarse del clima.
- CASA: mami, familia, playa, arena, gente, amigos, milanesa con papa-fritas, bocinas en la calle, salida del sol en el mar, la tele de la vieja del 1ro B a todo volumen porque no escucha un cazzo, ir al supermercado y a la panadería donde voy desde que tengo memoria, saludar a Cristina (la portera), escuchar los frenos del 551 cuando cruza Gascón, el olor de la verdulería de enfrente, calentarme con el tero que tiene el nido a 20 metros de mi ventana disfrutar imaginándome formás sádicas de fulminarlo...

Pablo dijo...

Bueno, para no poder dormir soñaste bastante compañero.

Anónimo dijo...

Saltar de pesadilla en pesadilla, es como no dormir.

Yo también quiero ir a mi CASA. Me gusta mi casa y estoy en mi casa, pero la CASA es la que extraño a rabiar. A tu regreso no te olvides los alfajocitos.

pal dijo...

aguanta Martínez! ya no falta nada...