¿Quién va a venir a mi funeral? ¿Quién va a visitar mi tumba?
¿Qué va a quedar en mi computadora?
¿Quién va recordar las cosas sabias que dije? (Asumiendo que haya dicho alguna...)
¿A quién llevaría a algún viaje si tuviera un VW de esos tipo bus?
Vivo antagonizado, molesto, irritado por la estupidez y mi alrededor. Los argentinos, aunque sospecho que cada cultura a su manera, insisten en cagarse en el prójimo y (esto sí es común a todos) son sus peores enemigos. Si hoy los ingleses hicieran el equipaje y devolvieran las islas Malvinas, no sabríamos qué hacer con ellas y definitivamente las haríamos peores, equiparando en tiempo récord la situación social y de infraestructura al clima. Estoy aprendiendo, por ejemplo, acepciones a palabras que creía conocer. Un par de ejemplos:
Pelotudo
/adj/
Del latín me cagum en el projimum
Peatón que cruza por la senda peatonal con el semáforo en verde para él.
Boludo
/adj/
Del latín me cagum en la legem
Forma afectuosa de quien, aproximándose por la izquierda a una encrucijada, se refiere a quien viene por la derecha y tiene el atrevimiento de usar su prioridad y pasar primero.
Es triste vivir en un lugar donde simplemente no podés conducir los aspectos más básicos de vivir, como cruzar la calle sin que te pasen por encima, pasear el perro en una plaza sin que te pasen por encima o te ataquen o pisar caca, conversar, pensar, o esperar que los legisladores hablen de los problemas de la gente y no de las idas y venidas de sus chicanas, que no le interesan a nadie. A ellos tampoco, pero creo que piensan que les sube los índices de audiencia o algo así, o que así justifican ganar 30 veces el salario mínimo. También sería lindo, aunque a lo mejor es ponerse exigentes, salir con alguna idea de volver a tu casa sin que te apuñalen, te metan un tiro o cosas por el estilo. Y que cuando llegues a tu casa no haya sido violada. Ya sé, soy raro y tengo ideas locas, pero soñar no cuesta nada, ¿no?
Me sacan las ganas de salir a caminar, de manejar (incluso la moto), o en general de meterme en cualquier situación donde tenga que interactuar con ellos. La estupidez me irrita más que la maldad, pero cuando se mezclan... Es deprimente haber vivido en otro lado y sido testigo de cómo se puede vivir simplemente con unos cambios muy sutiles pero determinantes en el resultado. Y estos tienen las mismas Leyes que los alemanes, por mencionar a algunos, pero prefieren ignorarlas. Aplausos. Imbéciles.
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