Como cualquier persona aficionada a la fotografía, soy de mirar cosas que al común de las personas se le pasan por alto, no le interesan o no comprenden su potencial para estimular emociones. Mirando ahí y allá, en uno de esos nichos encontré la siguiente frase escrita anónimamente (hasta donde pude ver):
Cuando muera la palabra (si se muere), yo te estaré esperando -otra vez- detrás de la piedra, al lado de la luna caída, fiel a tu voluntad de amarme siempre, más allá de las horas y los días, del silencio total.
Abajo muestro la foto que saqué. El pedazo tapado por el jarrón lo pispeé desde otro ángulo. Se lo traduje a Novia, que estaba conmigo, y los dos nos quedamos mirando la tumba, casi sintiendo el amor de una persona hacia otra. No sé de quién eran los restos ni importa. Pero obviamente dejó mucho de sí en este mundo para que una persona lo/a ame así.
2 comentarios:
Yo lo sigo extrañando, pero cada día un poquito menos, y cada vez lloro menos también. O quizá cada día me engaño más.
Lalo,
explayáte un poco que siempre me cuesta seguirte. ¿O se te hace muy triste? No quiero hacerte revolver en cosas de las que no quieras hablar, pero me la dejaste picando en el área chica.
Dicen que el tiempo cura todo. Yo sigo esperando.
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