Lo que no te mata te hace más fuerte.
Andá a la RPMQTRP. Hay cosas que te muerden el alma incicatrizablemente. Te gangrenan, te roban un pedazo de tu ser, te quiebran de tal forma que no hay manera de volver a ser el de antes.
Se dice el pecado pero no el pecador.
¿Por? ¿Qué calibre de idiota hay que ser para creer en semejante pavada? "La información, sin fuente, no es nada", insistía mi profe de estadística. Me pareció exagerado. No lo era, en lo más mínimo. Y las cosas necesitan contexto, y a veces la misma exacta acción hecha por dos personas diferentes arroja un resultado completamente distinto.
Tenés que ser más tolerante.
¿En serio? ¿Te parece? Decime: ¿qué solucionaría? De solucionar, me refiero, no de pasarla uno mejor. Porque yo lo veo al revés: hay que ser menos tolerante. Hay que empezar a reputear de arriba abajo a los que se paran en el medio de la vereda tapando el único hueco para que circulen los demás, los que en el café ponen el volumen del aviso de mensajito de WhatsApp a lo Rolling Stones en River, los que estacionan en la senda peatonal, los que dejar la puerta del ascensor abierta para atender al sodero, los que no levantan la caca del perro, los que andan con la moto en la plaza. Hay idiotas para hacer dulce, así que la responsabilidad darwiniana es que se la hagamos difícil: que sufran, se estresen y queden estériles. En lo posible antes de que se reproduzcan. Lo cual me recuerda a la película Appleseed, la parte en que el Consejo de Ancianos explica que como no pueden moralmente dañar a los seres humanos, tienen un agente esterilizante almacenado en un D-Tank listo para usar. En realidad, pienso que esta película me inspira de alguna manera. Ojo: esto no es para nada una variante de Mein Kampf o una perversión así, sino más bien una admisión de que Thanos, o yendo a su fuente de inspiración, el economista británico del siglo XVIII, pastor Thomas Malthus, algo de lógica tenía, no solamente delirios de grandeza y un me-cago-en-el-prójimo todavía más grande que el de los argentinos.
Si esperaste tanto, podés esperar un poco más.
Nop, en lo más mínimo. De hecho, justamente porque ya esperé tanto es que estoy repodrido, así que metele pata.
¿Y qué te molesta?
¿Vos de veraz pensás que me molesta esta estupidez en particular que acabás de hacer? ¿Y que vos sos el que determina cuánto puede molestarme? Pedazo de aborto fallido imbécil, excelente propaganda andante de anticonceptivos. Lo que me molesta es la seña inequívoca que acabás de publicar al que preste un poco de atención, de que te cagás soberanamente en el prójimo, y resulta que basura como vos sobra. Así que hacenos un favor y enterrate.
Estas cosas la he ido escribiendo en los últimos 8 meses. Es como que se me iban viniendo a la cabeza pero era todo demasiado poco y repetido para hacer un texto que valiera la pena, y he ido puliéndolo con la intención de hacerlo mejor y más rico y constructivo, y lo logré, pero en algunos aspectos es peor, más fuerte, más "blanco y negro" y menos gris. Pero no puedo evitarlo, así veo las cosas, es parte integral de mi personalidad. Un amigo que quise mucho y murió muy joven, más joven de lo que yo soy ahora, tristemente, decía que si uno no sabía explicar algo era porque no sabía ese algo. Esa muletilla de "cómo te explico" era totalmente inválida para él. Creo que tenía razón. Y lo extraño muchísimo. No pienso seguido en él; supongo que como mecanismo de defensa y para no ponerme triste.
Hoy es un día hermoso. El servicio meteorológico decía que iba a hacer 26°, aunque en este momento (un poquito pasadas las 4 de la tarde) haga algo menos, y hay un sol hermoso. Yo estoy en un café escribiendo en la computadora. Me siento muy triste, muy depre, aunque no mal, por lo menos no ahora. Ayer sí, mucho. Horrible. Toda la semana, en realidad. Fue muy duro. Fui a la playa con perro para ver si lograba levantar el ánimo pero mucho no ayudó. Lo de siempre: la soledad, exacerbada por la falta, también, de amigos o vida social en general. Anoche fui a comer con Hermana, cuñado y sobrinos y eso me hizo bien, pero me fui a acostar y estaba solo, y me desperté y, salvo por los 25 kg de pelos en forma de pastor australiano, seguía solo. Él es la mejor forma de estar solo, no cabe duda, pero necesito una mano, una cintura, un abrazo. Y a Perro los abrazos lo incomodan.
Estos días me cayó la ficha de que la camarera agrega contraste a mi situación, porque es todo lo que busco en una mujer que apenas conozco, pero demasiado joven. Permanentemente me recuerda lo que adoro del cortejo y el irse conociendo, pero no puedo agregarle nada, no puedo pretender avanzar, ir hacia algo. Tengo que disfrutar su existencia los 5 minutos diarios que la veo, y después levantarme e irme. Muy, muy choto. Solamente puedo rezar a un dios en el que no creo, para que la próxima, la que tiene las mismas cualidades pero no doblo en edad, esté a la vuelta de la esquina y nos encontremos. Me saca la respiración pensar en esa posibilidad. Ojalá supiera qué mierda hacer para ayudarla a llegar.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario